<H1>DERECHOS Y DEBERES DE LOS JUGADORES (II)</H1>

DERECHOS Y DEBERES DE LOS JUGADORES (II)

  Vamos con los deberes de los jugadores:

• Los jugadores deben cumplir las normas de convivencia, asistencia a entrenamientos y partidos, respeto a compañeros, entrenadores, rivales, público..., que el club tenga establecidos. --- Parece obvio y lo es. El respeto máximo a todos los estamentos del club (sobre todo compañeros y entrenador), así como a los rivales, árbitros, etc.
• Los jugadores deben asistir a TODOS y cada uno de los entrenamientos programados por el equipo. Deberán acudir con la ropa adecuada. --- No es la primera vez que me encuentro con jugadores que traen unas zapatillas poco adecuadas para la práctica deportiva.

• De la misma manera, los jugadores deberán asistir a todos y cada uno de los partidos de su equipo. --- Tanto en el caso de los entrenamientos como en los partidos, la idea primera es siempre acudir. Es cierto que todo dependerá de la categoría o edad de los jugadores, del tipo de equipo del que estemos hablando (no es lo mismo unos benjamines que unos senior), etc.
• La puntualidad y la actitud, al margen de las aptitudes que cada uno tenga, deben ser siempre las adecuadas. --- Hay que ser estrictos en esto. Generalmente las instalaciones no pertenecen al club. Cuestan un dinero (demasiado creo yo) y hay que aprovecharlas al máximo. Por ello se recomienda que a la hora prevista para el comienzo del entrenamiento o partido, los jugadores estén ya cambiados, con el calentamiento realizado y la mentalidad adecuada (concentrados).
• El entrenador está para ayudarnos. Él es que sabe y tratará de enseñar sus conocimientos sobre el juego. Los jugadores deberán cumplir y seguir, en la medida de la posible, las directrices del cuadro técnico. --- El entrenador, salvo alguna excepción, suele ser una persona cualificada, que tiene un bagaje o una experiencia previa, que conoce el juego y la forma de llevar un grupo. El entrenador intenta hacer crecer a los jugadores (personal y deportivamente) y, aunque a veces sus decisiones puedan parecer injustas (a veces se puede equivocar), es la persona responsable de dirigir el equipo y, por tanto, sus directrices hay que cumplirlas.
• Las normas básicas de higiene y salubres deberán cumplirse en todo momento. --- Siempre que sea posible, que los jugadores se duchen, tras acabar el entrenamiento y realizar los estiramientos pertinentes, en la propia instalación. Sé que a veces esto no es posible, pero cuando lo sea, es lo más adecuado higiénicamente y además puede evitar algunos constipados tontos (jugadores que tienen que ir sudados a casa).

• Los jugadores deberán justificar las ausencias a los entrenamientos y partidos con cierta antelación al entrenador, salvo causas de fuerza mayor que así lo impidan. --- Hemos dicho que los jugadores deben asistir a todos y cada de uno de los entrenamientos. Creemos que ese debe ser el punto de partida, pero lógicamente hay enfermedades, épocas de exámenes, etc. En cualquier caso, y las nuevas tecnologías nos lo permiten a través de los m´ñoviles, hay que avisar al entrenador para que este:
• No se preocupe ante la ausencia de un jugador y conozca su estado actual y dónde se encuentra en la hora de entrenamiento.
• Para poder preparar dicho entreno de la mejor manera posible. No es lo mismo entrenar con 6 que con 12.
• Los jugadores representan forman parte de un equipo y, generalmente, este forma parte de un club. Por tanto deberán cuidar la imagen que del mismo se de. Asimismo el club deberá defender a los jugadores cuando sean atacados sin motivo alguno por agentes externos. --- Obviamente, los jugadores representan a un equipo, a un colegio o a  un club y sus comportamientos, especialmente los antideportivos, pueden manchar la imagen de todo un club. hay que evitar en la medida de lo posible que esto ocurra y, si es así, tomar las medidas adecuadas. En caso contrario, si un jugador o un miembro del club es atacado sin motivo alguno, toda la maquinaria de dicho club o colegio debe ponerse en funcionamiento para esclarecer la situación y limpiar la imagen del mismo.
• Cuidar al máximo las instalaciones de entrenamiento y de juego que los jugadores utilizan en nombre del club. --- La mayoría de los equipos entrenan en las instalaciones del colegio o, en el mejor de los casos, alquilan un polideportivo para poder entrenar. Las instalaciones sean o no propiedad del club deben ser cuidadas al máximo, asegurando su permanencia en el tiempo. Un ejemplo: un equipo de mi club rompió unas taquillas de unos vestuarios y el club, no sólo tuvo que pagarlas (aunque al final se lo hizo pagar a los jugadores), sino que fue expulsado todo el club, el resto de equipos de dicha instalación, perdiendo además la fianza entregada.
• En el caso de sufrir algún tipo de lesión, deberán seguir el protocolo que el club equipo tenga establecido para dichos casos, así como las posteriores instrucciones médicas a seguir. --- Esto da más problemas de los que debería. En muchos casos la federación del país o región tiene establecido un protocolo a seguir en caso de lesión de un jugador (hay que llamar a tal número, ir al hospital xxxxx....). En muchos casos, cuando los niños son pequeños, los padres tienden a saltárselo (lógicamente por ayudar a sus hijos), pero incumpliéndolo y provocando futuros problemas. Luego la aseguradora no se hace cargo de las visitas al médico o de las operaciones si no se han seguido los pasos establecidos.

• Abonar las cuotas establecidas para cada temporada. --- Sabemos que esto es de Perogrullo, pero no siempre se cumple. Las instalaciones cuestan un dinero, el material, el campo del juego, los arbitrajes y los padres en este caso deben cumplir con el club para que la economía de este no se vea afectada.
• Seguir las jerarquías y cadenas de mando que deben existir en cada equipo. Por ejemplo, si existe un capitán, que sea este el enlace con el entrenador y entre este y el resto de los compañeros de equipo. --- Normalmente en todo equipo hay un capitán. Si hay una queja generalizada de los jugadores sobre algún comportamiento del entrenador (por ejemplo, sus métodos de entrenamiento) y para evitar posibles represalias de este en forma de minutos en el terreno de juego, todas las quejas y sugerencias deben pasar por el filtro del capitán. Este debe ser una persona responsable, un ejemplo para los compañeros y una persona en la que confíen tanto ellos como el entrenador. Parece una tontería, pero en mis tiempos, cuando yo jugaba, no existía esto y un compañero mío se quejó al entrenador de varios aspectos sin pasar por el filtro del capitán. Incluso, sus padres, acudieron a hablar con el entrenador, cuando eran cosas muy nimias que podían resolverse dentro del vestuario. ¿Qué hizo el entrenador? Pues casualmente, ese jugador que era uno de los que más jugaba, pasó a ser "carne de banquillo" el resto de la temporada.

VIVA EL BALONCESTO !!!

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