RESPETO AL COVID PERO CON SENTIDO COMÚN
Nunca jamás pensé que algo como esto del Coronavirus pudiera afectar a tanta gente y a su forma de vida. Hoy mismo, un amigo mío me decía que la mayoría de la gente en España y en todo el mundo, ha vivido algún tipo de guerrra: desde pueblos que poblaron la Península Ibérica hace muchos siglos, cómo romanos, bárbaros o árabes, hasta las más recientes Guerras Mundiales y la Guerra Civil. Muchos de nosotros, por suerte, no hemos sufrido esta desgracia pero, según mi amigo, esta es "nuestra guerra".
Aunque las últimas noticias respecto a las vacunas son muy esperanzadoras, y hasta que éstas lleguen, la vida debe seguir y también los entrenamientos. Aunque hay muchas dudas e incertidumbres respecto al Coronavirus, si que parece claro que, por algún motivo los niños sufren en menor grado esta afección.
No soy político, ni epidemiólogo ni es mi intención hablar de esto hoy. Voy a hablar de baloncesto y de ejercicios que podemos practicar en esta situación hasta que todo se normalice.
Lo primero que hay que decir que este tipo de ejercicios es aplicable a todas las categorías, adaptando lógicamente las características al nivel físico, deportivo, técnico y táctico de los jugadores. Los chicos entrenan con mascarilla y aunque comenzamos la temporada con un balón por niño he de reconocer que esto, a día de hoy, NO lo cumplimos y la respuesta nos la dio una joven jugadora.
Llevábamos dos semanas entrenando con distancia, con un balón por niño, manejo de balón, diferentes finalizaciones, pases contra la pared, mecánica de tiro... Los niños se acaban aburriendo de todo y más de este tipo de ejercicios y un día se me acercó una jugadora y me dijo: ¿Por qué cada uno tenemos un balón y no nos lo podemos pasar? Es un poco absurdo.
Yo le contesté que bueno, con el tema del virus, al quedarse este en las superficies de contacto, pues que era mejor que cada uno tuviera el suyo... Salí como pude y como creo que hubiéramos contestado la mayoría de nostros con la información de la que hoy disponemos.
La niña, adolescente y un poco rebelde, me dijo: pero el tablero, el aro, la red y todo eso las compartimos todas. Si el virus se queda en las superficies, y por eso tenemos un balón cada uno, también se quedará en la canasta, por lo que si alguien tiene Covid y lanza a canasta y el virus se queda en ella, nos lo podría contagiar a los demás, ¿no?.
Yo la verdad es que me quedé de piedra y sin saber muy bien qué contestar. Le dije que estas eran las normas y que ese entrenamiento iba a seguir como estaba previsto, pero cuando llegué a casa me puse a pensar sobre ello y lo comenté con otros compañeros y la directiva. ¿Sabeis qué?. Creo que lleva razón.
Yo soy el primero que llevo mascarilla desde el primer día, mantengo la distancia, no me meto en sitios cerrados, etc, pero su propuesta me parece razonable. Si el balón pasa por la red cada vez que lanzan a canasta y el virus se queda allí, este puede pasar al balón y de allí, por lo tanto, al resto de jugadores y no sólo del equipo que está entrenando en ese momento sino de todo el resto de equipos. Lo mismo ocurre si el balón bota en el suelo o se lanza contra una pared.
No quiero con esto decir, insisto, que no debamos tomar todas las medidas y más, pero a veces algunas pueden ser un poco absurdas. Nuestro equipo sigue entrenando con mascarilla, separados en 2 grupos de 6 cada uno en cada media pista, con las numerosas puertas que tiene el polideportivo abiertas..., pero ya hemos incorporado el pase del mismo balón entre los jugadores.
Puede parecer una tontería, pero eso nos permite ampliar de forma exponencial el número, la variedad y el tipo de ejercicios que podemos practicar. Aún así y aunque habíamos comentado con los padres las normas generales (entre ellas, cada niño tiene un balón y sólo lo toca él), hemos vuelto a comunicarles esta nueva proposición y sólo un par de familias han puesto alguna pega (algo raro cuando hablamos de casi 200 chicos y chicas).
No quiero con esto crear polémica ni mucho menos. De verdad os prometo que tomo todas las medidas necesarias (muchas veces de más) pero creo que no debemos perder el norte, hacer caso a lo que no dicen los científicos y la ciencia y usar la imaginación porque un pase entre dos jugadores crea una interacción evidente entre los chicos, no sólo física sino también mental. De alguna forma, muy limitada, están socializando, relacionándose, conectando...
Los entrenamientos de antes parecían clases particulares, entrenamientos individuales dentro de un conjunto. No había esa interacción entre compañeros. Al permitir pases esto nos permite trabajar situaciones de 2x0, recepciones en movimiento, etc.
Yo estoy viendo equipos que entrenan sin mascarilla, con contacto, etc. A mi eso me parece jugar con fuego. Pero vayamos a un punto intermedio que es más habitual: equipos en los que hay un balón por niño pero en polideportivos cerrados y en espacios más reducidos.
YO, sinceramente creo que esto es más peligroso que lo que nosotros proponemos. ¿Qué os parece? Me gustaría que dierais vuestra opinión, eso si, siempre con respeto y educación o el comentario será eliminado.
VIVA EL BALONCESTO !!!
I LOVE THIS GAME !
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